El Hotel es perfecto, no solo para descansar y desconectarte, la comida y el trato es increíble, se siente que las personas ahí son felices y eso te hace la diferencia! Es toda una experiencia desde que llegas al Mesón la convivencia, el trato de las personas que trabajan ahí, y nuestro cierre de vacaciones con una cena de langosta a las brasas y bombones de postre en la fogata con un cielo inigualable, muchas gracias por todo, definitivamente regresaremos!